Las respuestas de las siguientes
preguntas pueden determinar la consecución o no de nuestro objetivo. Si en alguna de las preguntas se
obtiene un NO como respuesta, significará que no se podrá obtener nuestra ansiada
Independencia Financiera, al menos, en el tiempo que nos gustaría.
1) ¿Obtienes ingresos?
Estos ingresos
pueden ser por trabajo, por activos que nos generen beneficios, venta de
productos o servicios, rendimientos de inmuebles o fincas… Si la respuesta es
negativa, puedes dejar de seguir leyendo.
2) ¿Ahorras?
Primer
objetivo cumplido, obtenemos ingresos. Si estos ingresos son menores a nuestros
gastos, también podemos dejar de leer. Pero por si el contrario los ingresos
superan a los gastos, podemos continuar contestando a nuestro pequeño test.
3) ¿Inviertes?
Obtenemos
ingresos, ahorramos, pero, ¿invertimos lo que ahorramos? A no ser que el nivel
de ahorro sea muy, muy elevado, sin inversión es muy difícil que lleguemos a
conseguir nuestro objetivo, al menos en un tiempo menor.
4) ¿Obtienes rentabilidad en tus inversiones?
Si después de
conseguir ahorrar nos equivocamos en la inversión, podemos llegar a perder
parte de nuestro patrimonio, incluso la totalidad de él. Pensad en las personas
que invirtieron en el banco popular…
Hemos respondido a las 4 cuestiones
de manera positiva, esto nos “asegura” llegar al objetivo? La respuesta es no,
pero tenemos muchas más opciones de conseguirlo.
A más ingresos tienes una
posibilidad de ahorro mayor. Cuanto más dinero tengamos para ahorrar, podremos
invertir y diversificar más. Tendremos mayores probabilidades de obtener más
rentabilidad, y permitirnos alguna equivocación.
Trabajemos, ahorremos, invirtamos
bien y seamos constantes. Así podremos llegar a no depender financieramente de
nadie.
↑ INGRESOS à ↑ AHORRO à ↑ INVERSIÓN
Y DIVERSIFICACIÓN à ↑
RENTABILIDAD à ↑
PROBABILIDAD DE CONSEGUIR NUESTRO OBJETIVO